OPINION

¿VA EL SALVADOR POR LA RUTA CORRECTA? UNA SEÑAL DE CAMBIO EN EL HUMOR COLECTIVO

Por:

Douglas Agreda

La más reciente encuesta de CID Gallup, realizada en enero de 2025, confirma que Nayib Bukele sigue contando con un sólido respaldo ciudadano: un 85% de aprobación. Pero esta cifra, aunque aún envidiable para cualquier mandatario del continente, evidencia una leve pero significativa erosión respecto al 89% registrado un año antes. En un país acostumbrado a cifras contundentes y narrativas de victoria, el matiz importa.

Más allá del porcentaje de respaldo presidencial, lo que empieza a mover las alertas es la respuesta a una pregunta clave: ¿Va El Salvador por el camino correcto? En 2024, un abrumador 87% respondía que sí. Hoy, esa cifra ha bajado al 73%. No se trata aún de una ruptura, pero sí de una inflexión. El entusiasmo colectivo empieza a mostrar grietas, y la percepción de rumbo comienza a cambiar.

DE LA ESPERANZA AL REALISMO

¿Qué está detrás de esta caída de 14 puntos en apenas un año? Varios factores se perfilan con fuerza. La desaceleración económica pesa: la estabilidad macro y los logros en seguridad no han sido acompañados de un crecimiento real en empleo formal ni mejoras palpables en el poder adquisitivo. Además, gana espacio la percepción de que el gobierno privilegia a sectores empresariales, una imagen lejana al discurso de cercanía con los más pobres.

El agotamiento institucional también asoma. Reformas legales a ritmo vertiginoso, la consolidación del poder en el Ejecutivo y la tensión permanente con actores internacionales dibujan un panorama que, aunque aún respaldado por las mayorías, ya no está libre de preguntas. Y esas preguntas importan.

UN GOBIERNO BIEN CALIFICADO, PERO CON ASIGNATURAS PENDIENTES

Los datos sectoriales del estudio son reveladores. La educación infantil y juvenil goza de un 81% de aprobación. Salud y vivienda, 64%. Relaciones con Estados Unidos, 65%. Incluso el siempre sensible costo de la vida obtiene un 70% de respaldo. Pero hay un dato que contrasta y preocupa: solo el 28% aprueba la creación de empleos. En un país joven y con alta informalidad, el empleo no es un tema más: es el tema.

CUESTIONAMIENTOS NECESARIOS

En medio del debate sobre los resultados, también surgen dudas sobre la imparcialidad de los instrumentos de medición. Luis Haug, gerente general de CID Gallup, ha sido el rostro visible de las encuestas en los últimos años. Aunque no hay evidencia pública de vínculos comerciales con el oficialismo, la independencia percibida de las encuestas será clave para mantener su legitimidad. Porque en democracia, la credibilidad es tan importante como la aprobación.

UN NUEVO CAPÍTULO EN LA RELACIÓN GOBIERNO-SOCIEDAD

El Salvador sigue siendo, para muchos, un país más ordenado y seguro que hace cinco años. Pero el humor social es cambiante, y la narrativa del “nuevo El Salvador” comienza a enfrentarse a la prueba más difícil: cumplir expectativas reales. La gobernabilidad ya no podrá sostenerse solo en imagen o control institucional. El desafío ahora es responder a una ciudadanía cada vez más informada, más exigente y menos dispuesta a aplaudir sin preguntar.

Nota editorial: Este artículo refleja el análisis del autor con base en datos públicos. No representa necesariamente la posición de CID Gallup ni del gobierno salvadoreño.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

error: Contenido Protegido !! «Copyright» Elmetidosv.com