Un total de 3,300 migrantes hondureños fueron expulsados de Guatemala y regresados a su país
Un total de 3,300 migrantes hondureños fueron expulsados de Guatemala y regresados a su país, luego de desintegrarse la caravana de migrantes que pretendía llegar a Estados Unidos.
El presidente guatemalteco, Alejandro Giammattei, expuso que las fuerzas de seguridad de su país pudieron “contener” el éxodo migratorio, evitando así la propagación del COVID-19.
“Hay un hecho que es real, y es que estamos viviendo una pandemia que en Guatemala nos ha costado controlar con meses de esfuerzos”, expresó el gobernante.
“Es una obligación de nuestra parte disminuir el peligro de contagio o rebrote de la enfermedad”, agregó Giammattei.
La caravana de migrantes hondureños ingresó a Guatemala el pasado jueves, derribando un cerco policial. Luego, con el paso de las horas, se fragmentó en varios kilómetros, ya que algunos lograron subirse a vehículos pesados para avanzar.
Ya para viernes y sábado, cientos de policías y militares extendieron retenes en las carreteras obligando a retroceder a los hondureños. “Respetamos el derecho a la migración siempre y cuando esta sea regulada y se cumpla con los requisitos y protocolos que han sido establecido”, dijo Giammattei, a la hora de justificar los retenes.
Guatemala es uno de los país más afectado por el COVID-19 en la región. Hasta este domingo, se reportan 93.963 contagios y 3.293 fallecidos.