CHALCHUAPA VIVIÓ SU FE: SEMANA SANTA 2025, UN TESORO CULTURAL INTANGIBLE DE EL SALVADOR
La ciudad centenaria de Chalchuapa, en el departamento de Santa Ana, vivió con fervor y profunda devoción la Semana Santa 2025, una de las celebraciones más emblemáticas de El Salvador, declarada oficialmente como Bien Cultural Intangible de la Nación por la Asamblea Legislativa.
Durante esta semana sagrada, miles de feligreses y visitantes se unieron para rendir homenaje a la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo, reviviendo tradiciones centenarias que reflejan la identidad espiritual y cultural de este histórico pueblo.
DOMINGO DE RAMOS: JESÚS ENTRÓ TRIUNFANTE

La Semana Santa comenzó con la emotiva Procesión de Ramos, donde los fieles caminaron entre cantos, oraciones y palmas, rememorando la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén. Las calles de Chalchuapa se llenaron de fe, color y esperanza en un ambiente de unión familiar y comunidad.
LUNES SANTO: SE REALIZÓ LA LAVADA DE LA ROPA DEL SEÑOR

Una de las tradiciones más representativas se llevó a cabo el Lunes Santo: La Lavada de la Ropa del Señor. La Hermandad de Jesús Nazareno trasladó en procesión las vestiduras de Cristo hasta el tradicional balneario El Trapiche, donde 12 mujeres, representando a los apóstoles, lavaron las prendas en un acto simbólico de purificación espiritual y servicio. Esta tradición, con más de 100 años de historia, sigue viva como testimonio de la fe inquebrantable del pueblo chalchuapaneco.
MIÉRCOLES SANTO: SE GUARDÓ EL SILENCIO SAGRADO

La ciudad se sumió en recogimiento con la Procesión del Silencio. Con antorchas encendidas y un silencio reverente, los fieles acompañaron la imagen de Jesús Nazareno, meditando sobre su pasión. Fue una noche solemne y profundamente espiritual, que unió a generaciones enteras en oración.
VIERNES SANTO: SE REVIVIÓ EL VÍA CRUCIS Y EL SANTO ENTIERRO

El Viernes Santo, al mediodía, se vivió con intensidad el tradicional Vía Crucis, recorriendo las estaciones de la pasión de Cristo por las calles de Chalchuapa. Parte de la ruta procesional fue adornada con hermosas alfombras elaboradas por familias, comunidades y jóvenes voluntarios, quienes con aserrín teñido, flores y creatividad rindieron homenaje al sacrificio de Jesús. Estas alfombras de arte efímero llenaron las calles de color, devoción y tradición.

Por la noche, la ciudad se llenó de luto y reverencia con la majestuosa Procesión del Santo Entierro, una de las expresiones de fe más conmovedoras y multitudinarias, donde la imagen de Cristo Yacente fue acompañada por miles de fieles en silencio, oración y respeto.
SÁBADO DE GLORIA Y DOMINGO DE RESURRECCIÓN

La celebración concluyó con la Vigilia de la Luz el sábado por la noche, símbolo del paso de la oscuridad a la esperanza.

El Domingo de Resurrección, la alegría se desbordó con la Procesión del Cristo Resucitado, marcando el triunfo de la vida sobre la muerte y cerrando con júbilo una semana santa inolvidable.
Chalchuapa vivió su fe con el alma, honrando sus raíces, transmitiendo su devoción y confirmando por qué es cuna de una de las Semanas Santas más solemnes y respetadas de El Salvador.
