Visto para sentencia en España el juicio a un excoronel salvadoreño por la masacre de jesuitas
Largamente esperado en El Salvador y España, el juicio al excoronel Inocente Montano por la matanza de seis jesuitas y dos colaboradoras en San Salvador en 1989 quedó visto para sentencia este miércoles en un tribunal madrileño.
«Se da por culminado el juicio y se declara visto para sentencia», indicó el juez José Antonio Mora de la Audiencia Nacional en San Fernando de Henares, a las afueras de Madrid, cerrando así la última sesión de este proceso iniciado a principios de junio.
La sentencia contra Montano, quien llegó extraditado a finales de 2017 desde Estados Unidos donde residía, puede tardar semanas en emitirse.
Viceministro de Seguridad Pública en el momento de los hechos, Inocente Montano, hoy de 76 años, está acusado de haber sido uno de los altos dirigentes del país que ordenaron la masacre en el campus de la Universidad Centroamericana (UCA), por la que nunca ha sido condenado ningún autor intelectual.
En el marco de la guerra civil en el país centroamericano (1980-1992) y en medio de una ofensiva guerrillera sobre la capital San Salvador, el 16 de noviembre de 1989, efectivos del ahora proscrito batallón Atlacatl asesinaron a los religiosos y sus colaboradoras.
Las víctimas fueron el hispanosalvadoreño Ignacio Ellacuría (rector de la UCA), los españoles Ignacio Martín Baró (vicerrector), Segundo Montes, Amando López y Juan Ramón Moreno, el salvadoreño Joaquín López, y sus colaboradoras Elba Ramos y su hija Celina.
Montano, que compareció en el juicio sentado en silla de ruedas y con mascarilla, un requisito por la pandemia del coronavirus, insistió este miércoles en sus palabras finales en desvincularse de los hechos.
«Juro al tribunal, ante ustedes y mi Dios que no estoy mintiendo: En ningún momento participé en una reunión en la cual se diera la orden de matar a los curas», afirmó Montano con voz cansada, ofreciendo su «sincero pésame» a los familiares de las víctimas.
Su defensa alega que los hechos prescribieron, según las leyes salvadoreñas, pero la fiscalía defiende que según la justicia española el procedimiento no prescribió, porque la investigación se inició dentro de los 20 años de plazo en 2009, gracias al principio de justicia universal.
- «Enemigo de la humanidad» –
La fiscalía pide 150 años de cárcel para Montano por haber participado «en la decisión, diseño o ejecución del asesinato» como parte de «una estructura paralela, al margen de la legalidad, que alteró gravemente la paz pública, provocando un estado de terror en la población».
En su alegato final el martes, la fiscalía afirmó que quedó «claramente acreditada» la participación de Montano en dicha estructura.
El abogado Manuel Ollé, representante en el juicio de la Asociación Pro-Derechos Humanos de España, aseveró este miércoles que este proceso juzga «a un enemigo de la humanidad» y no a «un delincuente común».
Dirigiéndose a los jueces, afirmó que su sentencia será «muy importante después de 30 años de sufrimiento», porque puede servir de «reconocimiento para las víctimas, para los padres, para Elba y Celina, pero también para el pueblo salvadoreño», además de ser «un ejemplo de justicia para toda la comunidad internacional».
En El Salvador solo fueron juzgados los militares acusados de ser los autores materiales del crimen y recobraron la libertad gracias a una ley de amnistía de 1993.
Uno de ellos, el ex teniente Yusshy René Mendoza, declaró como testigo clave en el juicio vía telemática desde Chile, señalando a Montano como parte de la cúpula que ordenó la masacre. Este antiguo oficial fue sobreseído en esta causa.
En abril de 2018 un juzgado de San Salvador ordenó la reapertura de un proceso penal para investigar a los autores intelectuales de la masacre.
La guerra civil en El Salvador concluyó con un acuerdo de paz mediado por la ONU entre el gobierno y el FMLN, tras dejar más de 75.000 muertos y 7.000 desaparecidos.