A 20 AÑOS DE LA ERUPCIÓN DEL VOLCÁN DE SANTA ANA: EL DÍA QUE EL ILAMATEPEC DESPERTÓ
Santa Ana, El Salvador. Hace exactamente 20 años, el 1 de octubre de 2005, el volcán Ilamatepec, conocido como el coloso de Santa Ana, hizo erupción y marcó un antes y un después en la historia de las comunidades del occidente del país.
Ese día, el gigante natural expulsó una imponente columna de gases y cenizas que alcanzó cerca de 10 kilómetros de altura sobre el nivel del mar, acompañada de lava, rocas del tamaño de automóviles, agua hirviente y dióxido de azufre.
El impacto se sintió más allá de Santa Ana. El departamento de Sonsonate fue el más afectado por la caída de ceniza, cubriendo poblaciones como Juayúa, Nahuizalco, Izalco, Armenia, Apaneca y Concepción de Ataco. Incluso, se reportaron acumulaciones de ceniza en zonas fronterizas de Guatemala.
Las comunidades más cercanas al volcán fueron cubiertas por una densa nube que, al mezclarse con la lluvia, provocó la caída de lodo con un fuerte olor a azufre, dejando un escenario desolador para miles de familias.
La erupción del 1 de octubre de 2005 se convirtió en una fecha inolvidable para los habitantes de la zona, quienes, con esfuerzo y resiliencia, lograron levantarse y reconstruir sus vidas.
Hoy, dos décadas después, el recuerdo del despertar del Ilamatepec sigue vivo como una lección de fuerza, unidad y esperanza frente a la adversidad.
